Hoy ,en terapia, no fue un viernes cualquiera.
Hoy, no es un viernes cualquiera.
Como cada viernes, cada tarde, acude a su consulta de terapia. Cada viernes, después de trabajar durante 45 minutos dedicamos entre 15 y 20 más a compartir experiencias visuales de la semana anterior y a preparar las próximas experiencias de la semana que se avecina.
Tras finalizar de trabajar, ya relajadas, comenzamos a compartir, a seguir ambas ese hilo conductor entre paciente y terapeuta tan importante y tan poco tenido en cuenta, ante la creencia que hacer terapia visual es tan solo hacer unos ejercicios protocolizados y generalizados para todas las personas.
En un punto de la conversación :
- Ella: Sabes Mercedes, la vida es un bonito viaje.
- Yo: No te entiendo.
- Ella: Pues eso ( me contesta sonriendo), que la vida es un bonito viaje.
- Yo: Y eso, ¿ de dónde lo has sacado ?
( mientras tomo mi libreta y voy anotando lo que ambas vamos diciendo)
-Yo: Espera, le contesto, deja que apunte.
( Seguimos)
- Yo: ¿ Por dónde íbamos?
- Ella: Me has dicho que de dónde lo he sacado.
-Yo: eso si, me pregunto yo. ¿ De dónde lo has sacado?
( mientras la miro entre expectante e impaciente a su respuesta; ambas nos sonreímos )
- Ella: De mi misma, la vida sólo se vive una vez y hay que disfrutarla. Tienes que hacer lo que te gusta,así de los momentos y de lo que aprendemos de nuestros errores.
En este punto de la conversación, intentaba compaginar y no perder su mirada ni dejar de prestar atención plena,al mismo tiempo que sus palabras las escribía en mi libreta.
Sin darme tiempo a poder responder a su última reflexión me dice:
-Ella: Cada vez que voy creciendo, me doy más cuenta de las cosas de la vida.
-Yo: ¿En qué sentido?
(se crea un silencio, ambas nos escuchamos)
- Ella: Cuando veo gente que hace cosas malas, me ayudan a decir que eso nunca lo haré.Que si, que tengo nueve años, pero tengo cosas que nadie puede tener.
Hoy,viernes 11 de noviembre de 2016, no es un viernes cualquiera, ni fue un conversación cualquiera.
Como cada viernes, cada tarde, acude a su consulta de terapia. Cada viernes, después de trabajar durante 45 minutos dedicamos entre 15 y 20 más a compartir experiencias visuales de la semana anterior y a preparar las próximas experiencias de la semana que se avecina.
Tras finalizar de trabajar, ya relajadas, comenzamos a compartir, a seguir ambas ese hilo conductor entre paciente y terapeuta tan importante y tan poco tenido en cuenta, ante la creencia que hacer terapia visual es tan solo hacer unos ejercicios protocolizados y generalizados para todas las personas.
En un punto de la conversación :
- Ella: Sabes Mercedes, la vida es un bonito viaje.
- Yo: No te entiendo.
- Ella: Pues eso ( me contesta sonriendo), que la vida es un bonito viaje.
- Yo: Y eso, ¿ de dónde lo has sacado ?
( mientras tomo mi libreta y voy anotando lo que ambas vamos diciendo)
-Yo: Espera, le contesto, deja que apunte.
( Seguimos)
- Yo: ¿ Por dónde íbamos?
- Ella: Me has dicho que de dónde lo he sacado.
-Yo: eso si, me pregunto yo. ¿ De dónde lo has sacado?
( mientras la miro entre expectante e impaciente a su respuesta; ambas nos sonreímos )
- Ella: De mi misma, la vida sólo se vive una vez y hay que disfrutarla. Tienes que hacer lo que te gusta,así de los momentos y de lo que aprendemos de nuestros errores.
En este punto de la conversación, intentaba compaginar y no perder su mirada ni dejar de prestar atención plena,al mismo tiempo que sus palabras las escribía en mi libreta.
Sin darme tiempo a poder responder a su última reflexión me dice:
-Ella: Cada vez que voy creciendo, me doy más cuenta de las cosas de la vida.
-Yo: ¿En qué sentido?
(se crea un silencio, ambas nos escuchamos)
- Ella: Cuando veo gente que hace cosas malas, me ayudan a decir que eso nunca lo haré.Que si, que tengo nueve años, pero tengo cosas que nadie puede tener.
Hoy,viernes 11 de noviembre de 2016, no es un viernes cualquiera, ni fue un conversación cualquiera.
